En la oficina de tu abuelo Luis colgaban dos cuadros que siempre estuvieron desde que tengo memoria. Uno de un cavernícola que decía: "Señor dame paciencia... !Pero la quiero ahorita! y otro que decía: No claudiques.
La verdad de niño nunca le puse atención al segundo pero recuerdo más al cavernícola del primero y siempre los asocio. Cuando uno crece se vuelve más como ese muñequito y recuerda más no claudicar.
Tu abuelo siempre me lo recordó. Aún cuando venimos a Costa Rica y desde ya lo comparto contigo. Las palabras son difíciles de asimilar, más si no se tiene la experiencia. La mía es diferente a la de tu abuelo pero aún así hemos pasado muchas pruebas como papás y esposos... tal vez así te toque a ti.
Con estas palabras solo te recuerdo - y me recuerdo a mi mismo - que nunca debes de resignarte, de decir: "ni modo, no hay de otra." porque cada día que llueve tiene un siguiente día de sol, aunque parezca repetitivo pero si pones las cosas en manos de Dios y haces todo lo posible... Él se encargará de hacer lo imposible.
Tu tienes en tus manos tus talentos. Úsalos, gasta tus zapatos andando, no te quedes en lo mismo, hay momentos para llorar, descansar, reir y también para trabajar y enfrentar las situaciones... pero No Claudiques.
foto: akifrases.com
Avances de esta semana
Ya sabes contar del 1 al 5 con los dedos. Claro, el tres que haces con los dedos es como el tres alemán. (Como en la película de Tarantino)
Cada vez que ves algún rótulo, libro o mensajes buscas la O. Te lo enseñó tu padrino Gustavo, cuando en el bus te dijo que ahí estaban las letras O, M de mamá, P de papá y S de Santiago.
Encontré una bonita página para que juegues en la compu: www.guiachinpum.com. Te encanta jugar el del tren, decir los colores de los vagones y decirles adiós.
Y hoy... ya me dijiste que querías ir a hacer "nines" y te llevé al baño a orinar.
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